Freidoras profesional
Una freidora industrial está diseñada específicamente para freír grandes cantidades de alimentos de manera eficiente en cocinas profesionales de restaurantes, hoteles, bares, cafeterías y establecimientos de comida rápida.
Pueden estar equipadas con características adicionales como controles de temperatura precisos, sistemas de filtrado de aceite, grifos de vaciado, cestas extraíbles y sistemas de seguridad para garantizar un funcionamiento seguro.
En Maxima se ofrece una amplia gama de freidoras comerciales que se adaptan a todo tipo de espacios y demandas del sector hostelero.
¿Qué tipos de freidoras ofrece Maxima?
Una freidora profesional permite freír rápidamente una gran variedad de alimentos como patatas fritas, pollo frito, empanados, aros de cebolla y pescado rebozado. Las freidoras industriales de Maxima están construidas con componentes duraderos y materiales robustos como el acero inoxidable. Dada su gran demanda en las cocinas, el catálogo de Maxima presenta tres tipos de freidoras: eléctricas, a gas y de inducción.
Freidora eléctrica
Las freidoras eléctricas se caracterizan por estar equipadas con unas resistencias que calientan el aceite. Son seguras y muy sencillas de utilizar, a pesar de que no calientan a la misma velocidad que una freidora a gas. Son muy recomendables para un uso intensivo. Las freidoras eléctricas están disponibles en diferentes tamaños y capacidades de la cubeta, según el volumen de producto que se quiera cocinar.
Existen freidoras de sobremesa o freidoras independientes que cuentan con una base con almacenamiento para ampliar el espacio de trabajo.
Algunos modelos vienen equipados con dos cestas para que se puedan freír varios tipos de alimentos a la vez. Las freidoras de sobremesa de mayor capacidad y las de pie incorporan un cómodo grifo de vaciado.
Freidora a gas
Para utilizar este tipo de freidora es necesario un punto de suministro de gas. Estas freidoras calientan a mayor velocidad el aceite, pero el gasto energético puede no resultar tan económico si se utilizan de forma diaria e intensiva.
También existen modelos que pueden colocarse sobre una encimera o mesa y modelos independientes de pie. Para mayor seguridad, estas freidoras llevan incorporada una válvula de seguridad de gas con termopar.
Freidora de inducción
Las freidoras de inducción son ideales para cocinas con un alto nivel de trabajo que necesitan aparatos que puedan empezar a funcionar inmediatamente. Mediante el uso de la inducción, el aceite se calienta rápidamente y puede mantenerse con precisión a la temperatura correcta. Son muy eficientes energéticamente y proporcionan un ambiente de trabajo más fresco y seguro, ya que no generan calor radiante.
¿Cuáles son las ventajas de una freidora profesional?
Una de las principales ventajas de utilizar una freidora comercial es la capacidad de producir rápidamente grandes cantidades de alimentos fritos. Estas freidoras tienen un control preciso de la temperatura y una distribución uniforme del aceite. Esto garantiza que los productos no se quemen y se cocinen siempre garantizando su textura y sabor.
Contar con una freidora de aceite en el equipo de cocina es fundamental para ofrecer un servicio eficiente y de calidad.
Otra ventaja de utilizar una freidora profesional en hostelería es su versatilidad. Pueden utilizarse para freír una amplia gama de alimentos. Algunos modelos también vienen con diferentes cestas de fritura y controles de temperatura, lo que le permite freír varios tipos de alimentos a la vez.
Invertir en una freidora también es una opción muy rentable. Al estar están construidas con materiales resistentes de alta calidad pueden soportar durante años las exigencias del día a día de una cocina profesional.
Precauciones al utilizar una freidora industrial
En primer lugar, para utilizar una freidora de forma segura hay que seguir las instrucciones de uso del fabricante así como las temperaturas recomendadas, el tiempo de fritura y el tamaño de las porciones indicados en el envase de los alimentos.
Siempre se debe llenar la freidora con aceite solo cuando esté apagada y nunca llenarla por encima del nivel máximo indicado. El aceite puede alcanzar hasta 200⁰C, por eso es muy importante extremar las precauciones cuando esté encendida.
Además, se debe colocar sobre una superficie firme y estable y a una altura en la que se pueda ver fácilmente el interior de las cestas. Para aquellos modelos de sobremesa, una mesa de trabajo de acero inoxidable con salpicadero es un lugar ideal.
Hay que tener cuidado con las salpicaduras de aceite, por ello se debe examinar y eliminar los posibles restos de hielo de los alimentos congelados que se introduzcan. Las tapas siempre deben utilizarse mientras las freidoras están en funcionamiento para evitar las quemaduras por salpicaduras.
Aspectos a tener a cuenta antes de comprar una freidora
La elección de la freidora perfecta para cada negocio depende de algunos factores que hay que tener en cuenta:
- Tipo de fuente de alimentación: determinar la fuente de energía de la que se dispone es fundamental antes de comprar una freidora. Si se opta por una freidora eléctrica, es primordial comprobar primero si se dispone de un enchufe de 230 V o de una toma de 400 V.
- Capacidad y tamaño: el tamaño y la capacidad de la freidora dependerá del volumen de alimentos que se vayan a servir diariamente. También es importante medir el espacio del que disponemos en la cocina.
- Colocación y almacenamiento: estos aparatos suelen estar en uso todo el día, por lo que se necesita un lugar seguro y estable para colocarlos, que no estorbe en el tránsito habitual de personas por la cocina.
Cómo limpiar una freidora comercial
En primer lugar, se debe desenchufar de la toma de corriente y dejar que el aceite se enfríe. Las freidoras comerciales con grifo de vaciado facilitan aún más la limpieza. Al abrir el grifo, el aceite se vierte y se recoge en un recipiente adecuado. En los aparatos sin grifo de vaciado, se pueden desmontar todas las piezas, incluida la resistencia. La bandeja extraíble suele ser la última en extraerse para su limpieza. El aceite enfriado se puede vaciar fácilmente.
Para lavar el interior de la freidora, se pone un poco de agua caliente y jabón lavavajillas en la cubeta para desprender la grasa. A continuación, se puede limpiar con un paño y enjuagar la bandeja con agua limpia. La mayoría de las piezas desmontables pueden lavarse en el lavavajillas.